«Las TICS ayudan a los residentes a envejecer activamente y sentirse más integrados con la sociedad»
30/05/2017

Sandra Sola Iso, de 24 años estudiante de 4º curso de Trabajo Social, eligió Residencia Beloso Alto para llevar a cabo sus prácticas como trabajadora social y desarrollar su trabajo fin de grado sobre cómo las TICs mejoran la calidad de las personas de tercera edad.

Aprovechamos la hora del café para juntarnos con ella y que nos cuente su experiencia. 

P- Tecnología y tercera edad, una dualidad complicada, ¿por qué elegiste este tema?

R-  La tercera edad queda casi totalmente excluida cuando se habla de las nuevas tecnologías, ¿por qué este colectivo lo tiene tan difícil para acceder a ellas? por eso lo he elegido, creo que todos tenemos derecho a saber manejarlas, a poder estar al día de la actualidad a través de Internet y para ellos, poder saber de su familia incluso hablar con ellos a través de Skype.

P- ¿Cuál sería el objetivo final del proyecto?

R- Lo que quiero es mejorar la calidad de vida de las personas en la residencia. No me mal interpretéis, aquí las cuidan muy bien, calidad de vida a otro nivel, a nivel de motivaciones, de interrelaciones, de integración con la sociedad, mantenerse informados de la actualidad.

A nivel de objetivos específicos me he planteado los siguientes: 

• Conocer los intereses que tienen las personas residentes (música, noticias…) para poder implicarlos en el manejo de internet.
• Observar el grado de adquisición de autonomía por parte de la persona residente.
• Evaluar si ha habido cambio en su estado de ánimo.
• Evaluar el grado de satisfacción del residente.
• Mantener, mejorar y reforzar las relaciones personales, tanto sociales como familiares.
• Aumentar sus motivaciones diarias.
• Incrementar las relaciones interpersonales de las personas residentes.
• Evitar que se produzca una exclusión digital de las personas residentes, mejorando así su integración social.
• Mantener o mejorar su nivel de autonomía.


P- ¿Cómo ha sido el trabajo con ellos? 

R-  Es difícil saber cómo van a funcionar, así que para empezar seleccionamos solo a 6 residentes para comenzar el proyecto. Primero, uno a uno, se les explicaba que era el ordenador, Internet y es preguntábamos qué conocimiento tenían de ello. A partir de aquí íbamos quedamos diferentes días con cada uno para explicarles cómo buscar información, cómo interrelacionarse con los demás etc. Es complicado, pero se les veía con ganas.

P- ¿Qué ha sido lo más complicado del proyecto?

R- Muchos venían con la idea preconcebida de ‘yo no voy  ser capaz, ‘ tenían miedo a probar, y esto, a veces, ralentizaba los pasos. Además, muchos olvidaban lo que habíamos visto en la sesión anterior y había que volver a empezar desde el principio..

P- Y, ¿lo mejor?

R- Me encontré con mucha más motivación de la esperada, además del cariño que te trasmiten, y de lo que aprendes de ello, porque si algo he aprendido es eso, los residentes tienen mucho que compartir y enseñas.

P- Si pensamos en el futuro,  ¿crees que sería factible llevar a cabo proyectos como este?

R – Sin duda. Sobre todo a la gente que, como aquí, están en una residencia. Los ayudaría a estar más conectados con sus familiar, a formar parte de la sociedad mediante las nuevas tecnologías, a envejecer activamente.